miércoles, 22 de noviembre de 2017

Niñez

Siempre sus ojitos me desvían la rutina. Es una suerte de admiración, o la melancolía que siento al saber que lo estoy perdiendo.
Yo los veo, los siento. Ellos miran, desarman, arman, vuelven a mirar. Sienten, se preguntan, se asombran, se animan a la curiosidad. Se animan a cuestionar. Se animan a reflexionar. No temen, porque no conocen el temor a la ignorancia. No conocen la ignorancia. No existe tal concepto para ellos. Respiran el mismísimo aprendizaje. Aprecian eso, aquello, todo lo que está a su alcance, y todo lo que no. Miran, observan y todos los sinónimos que esta lengua me permite.
Lo siento maravilloso, lo siento magnífico, a veces perdido. Me dejo llevar por esos ojos que no temen. Quiero alcanzar eso mismo. Quiero desarmar, armar.. olvidarme de que sé temer, temo no saber. Sé que la ignorancia es no poder. Sé que el conocimiento es poder. Con el tiempo aprendí a temer lo desconocido. Y con el tiempo dejé de ver, mirar, desarmar y armar. La culpa no es del tiempo, claro está.
Hoy me sentí una niña, otra vez. No podía parar de ver, mirar, querer entender. Me animé, me animé a desarmar. A preguntar, a no temer. Me animé a lo desconocido. Crecí, volví a ser niña otra vez. Feliz.

sábado, 28 de enero de 2017

9 años

La noche te invita a remover, sacudir...
quizás ordenar un poco.
Abrís la página indicada,
leés años de llanto.
Siempre el teclado fue un aliado. 
Cuando no hay manera de compartir, 
ni voluntad para discutir.. 
ahí te espera.
Lo que brota no es tan bueno, 
perdió calidad. 
Quizás sea un indicio, 
quizás no sea nada. 
Probablemente sea todo.

El mareo no es real,
es todo parte de un invento...
En el que dos almas se unen
y siguen a través del tiempo.
Sale una rima inspirada,
Que siempre se trata de dolor,
la mente creativa juega
Y trata de darle un poco de color.

Te convencés que con barrer una vez al mes, todo va a salir bien... ya van años gritando. A ver si alguna vez te conocés!

viernes, 27 de enero de 2017

El cuerpo no miente, algo siente. Tiembla al ver la espesa niebla. Mil errores, mil temblores. Cuál es el camino? Existe algo llamado destino?
El error... el error es creerte mío. 

El error... el error es quererte mío.